La magia -y la ventaja- de la televisión lineal radica en su frescura y capacidad para ofrecer actualidad en tiempo real. Incluso ahora que el consumo es multipantalla y, a veces, simultáneo, capturar la atención del espectador en un instante es una especie de liturgia en la que este sabe que ese preciso momento está siendo compartido por millones de personas, y eso sigue siendo imbatible. Y a diferencia del scroll interminable de las redes sociales, donde la información se dispersa entre miles de publicaciones, la TV lineal presenta los eventos en un formato curado y dinámico. Recuerden la franja de noticias en CNN, con su «Está pasando», y esa sensación de vivir el momento. Lo que permite a los espectadores sumergirse en la inmediatez de los acontecimientos, creando un sentido de comunidad a través de la experiencia compartida, se amplifica exponencialmente a través del móvil y le otorga al usuario un papel protagonista al ser capaz de comentar y lanzar su propio mensaje, ya sea en redes de microblogging, de contenido generado por el usuario o de mensajería instantánea. La experiencia de formar parte del momento y poder decir algo al respecto es muy poderosa.
Mientras que las plataformas OTT han revolucionado el consumo de contenido a la carta, enfrentan el reto de construir una comunidad sólida y generar conversación en torno a sus ofertas. Para ello, la interacción en tiempo real es esencial, pero es muy difícil. Prime Video emuló la TV lineal con Operación Triunfo y los Juegos Olímpicos en MAX resonaron fuerte en las redes. Pero la ficción es otra cosa. Sin duda la creación de eventos vinculados a los contenidos y el uso del marketing deben formar parte de la ecuación. Y no me refiero sólo a dinamizar y hacer vivir el catálogo en la propia plataforma, me refiero a acciones promocionales como la que hemos visto con la serie The Walking Dead: Daryl Dixon – The Book of Carol. En un mundo donde la atención es un recurso escaso, la frescura de la utilización de la TV lineal y la celebración de eventos con fans continúa siendo un referente de actualidad que vale la pena preservar. Como en los viejos tiempos.
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