En un adelanto del Libro de los Hechos 2023 de la agencia de noticias AdnKronos que se lanzará el próximo 21 de octubre, el director general de Mediaset, Piersilvio Berlusconi, se expresó de la siguiente manera al hablar sobre la controversia de lo que se considera o no televisión basura:
«Nunca antes en este 2023 la prensa y la web se han llenado de controversias sobre la llamada ‘televisión basura’, una expresión que a mí no me gusta en absoluto. A menudo es una vía fácil para denigrar la televisión ligera y despreocupada que, cuando se hace bien, puede ser auténticamente popular. La televisión, en términos de ‘a la antigua’, es un electrodoméstico. Un dispositivo que se puede encender o apagar. Cuando está encendido, se convierte en un medio de comunicación, al igual que la prensa y la web: algunos programas pueden ser educativos, pero no la televisión en su conjunto. Para entendernos, los menores no deben quedarse solos frente a los medios, ni frente a la televisión ni a ningún otro dispositivo. Nuestra televisión, la televisión comercial, es un medio de entretenimiento e información. Acompaña, divierte e informa en cada hora del día. Fuimos los primeros en ofrecer esta mezcla tan variada y vibrante al público. Y el resultado, reconocido por todos, es que el surgimiento de las televisiones independientes ha contribuido a la modernización de las costumbres. La llegada de nuestra competencia ha traído color a la televisión. Sorprendimos con programas revolucionarios, menciono solo para dar una idea ‘Drive In’ de Antonio Ricci. También cambiamos la información con el nacimiento del TG5, una propuesta que aportó frescura, libertad y una nueva forma de contar las noticias. Y muchos años después, en 2000, innovamos llevando a la televisión el primer reality, ‘Grande Fratello’: 100 días frente a las cámaras para chicas y chicos desconocidos que nunca habían estado en un estudio de televisión. Creando gran atención pero también muchas controversias. Por otro lado, la innovación genera debate, es normal. Pero creo que es nuestro deber seguir modernizándonos, intentándolo, saliendo de lo común. Debemos ser capaces de representar la realidad y la sociedad en todos sus aspectos y evoluciones, nos gusten o no. Por supuesto, debemos crear las condiciones para que nunca se llegue a la falta de respeto. Quiero dejar claro que no tenemos prejuicios: no nos escandalizan las figuras extravagantes, los debates a veces ásperos, los chistes irreverentes, pero nunca se debe llegar a la falta de respeto, ya sea entre los participantes de un programa o hacia el público.
En resumen, me parece que lo que con esnobismo se llama ‘televisión basura’ se refiere únicamente a momentos desafortunados, ya sea que la televisión se haga bien o mal. Pero si, como es correcto, se otorga libertad a quienes tienen la tarea de crear contenido siempre fresco y animado, puede ocurrir que se vaya más allá. Y debemos hacer todo lo posible para evitar excesos. Afortunadamente, los excesos representan una parte mínima en comparación con una televisión de gran calidad y riqueza como la que se emite las 24 horas del día en decenas de canales, públicos y privados.
En conclusión, la televisión popular, incluso cuando es ligera y divertida, agrada al público, me agrada a mí y también cumple un papel social importante. Estoy contento de poder reafirmarlo en una publicación de alto nivel como el Libro de los Hechos 2023″, manifestaba el ejecutivo.
© REPRODUCCIÓN CONFIDENCIAL