La compañía mexicana de postproducción Óxido abrirá su primera oficina fuera del país en Madrid. Bautizada como Óxido Madrid, el estudio mexicano inaugurará estas instalaciones en pleno centro de la capital, en concreto en la calle Santa Inés 6. Lo hace, además, para conmemorar los 18 años de existencia de la compañía en la industria. La sede madrileña ofrecerá una gran variedad de servicios más allá de la postproducción, tales como DIT (Data Manager), alquiler de salas de edición y de diseño y mezcla de sonido desde su sala certificada Dolby Atmos en México. A esto hay que añadirle los servicios de corrección de color con el software Baselight, siendo ya el sexto equipo operando bajo la licencia Filmlight, disponibles todos ellos para dar servicios conjuntos y simultáneos desde ambos continentes.
De hecho, uno de los aspectos principales por los que Óxido sobresale en el sector es por su capacidad de funcionar desde un único estudio que sume las sinergias entre las salas de México y de España a través de una nuble propia. Esto, junto a los diferentes usos horarios en ambos países permiten ofrecer un servicio constante durante las 24 horas del día.
Marco Rodríguez, director general y fundador de Óxido, fue el encargado de inaugurar el nuevo estudio el pasado 8 de febrero: «Al igual que México, España se ha convertido en un epicentro de la producción audiovisual que además está en constante crecimiento y mantiene una importante interacción con la industria en México, por lo que representa el lugar y el momento ideal para comenzar nuestra expansión», explicaba. En el acto estuvieron también presentes Raúl Lavado, colorista de origen español que ha trabajado en importantes producciones como Cuéntame o Dúos increíbles y que es socio impulsor del estudio, y otros profesionales mexicanos como el también colorista Fernando Medellín.
Rodríguez también explicó cuando surgió la idea de crear esta conexión entre México y Madrid: «A raíz de la pandemia nos dimos cuenta que el proceso de postproducción no requería de la presencia física de las personas en las salas, entonces diseñamos una interconectividad de las dos oficinas México-Madrid vía internet que nos permitirá ofrecer el servicio de corrección de color con una sala en España pero que se puede controlar desde México».
Desde su nacimiento en 2006, Óxido ha trabajado para diversas producciones de cine, series de televisión y publicidad. Entre los trabajos de postproducción que tiene a sus espaldas, destacan películas como Roma (Alfonso Cuarón), Cantinflas o la serie y la película de La casa de las flores. En España llevan ya meses recibiendo trabajos de proyectos de nuestro país, con los que trabajaba desde sus equipos en México: «Para nosotros, Óxido Madrid no es solo una oficina a 10.000 kilómetros de distancia, sino un proyecto que nos permite agregar una sala más a nuestro ecosistema», comentaba Rodríguez.
Finalmente, el director general de la compañía detalló la forma de actuar de aquí en adelante de Óxido: «La interactividad nos permitirá que nuestro equipo de postproducción esté involucrado en los proyectos de España aunque físicamente no estemos ahí. También buscamos que haya un intercambio de residencia de nuestros coloristas para mezclar culturas y visiones a nivel color que nos enriquezcan en ambos sentidos».
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